Las persianas son un elemento decorativo y estructural del hogar, ayudan a mitigar los rayos del sol, a lograr un poco de privacidad y aislarnos del entorno mientras estamos relajados en casa, pero existen varias complicaciones y problemas que se pueden presentar si no le damos el uso y manejo correcto.
El primer inconveniente siempre es la cuerda, al halar muy duro o de manera imprecisa puede trabarse y por consiguiente no permitir subir ni bajar. Para solucionar este problema te recomendamos tirar de la cuerda desde el cajetín de arriba hasta que logre seguir el curso regular del carril.
Por el contrario, si la falla es causada por la falta de un panel, debés llamar al fabricante, casi siempre prestan servicios de reparación y cuentan con el material y las medidas exactas para tu persiana.
Si la persiana baja sin resistencia, es por una avería de la pestaña que sostiene la cuerda, debés cambiar esa pieza para que la cuerda esté sostenida desde arriba.
Ahora, si la persiana es eléctrica, los problemas pueden venir desde el motor, que a veces se queda atascado y no permite la rotación completa. El interruptor también puede presentar fallas y no responder a la primera; para eso, buscá en timbrit a un electricista calificado para solucionar la falla.
¿El problema aún persiste? No te preocupes, descargá timbrit y ubicá a un experto en el tema cerca de tu hogar.